Parido redondo para Belgrano. Le ganó a River, una vez más, con una fiesta inolvidable de su público que copó tres de las tribunas del Kempes, y gritó hasta la afonía los goles de Pablo Vegetti, y embolsó una recaudación suculenta. Sobre todo por lo que dejaron los hinchas visitantes.
La polémica por el precio de las entradas para los hinchas de River, 13.500 pesos cada boleto para la popular, que con el servicio de cargo se elevó a 14.800, hizo que muchos desistieran de concurrir al Kempes. Incluso se lanzó un boicot en ese sentido en las redes sociales.
En cierta manera dio resultado, porque no se vendieron las 11 mil entradas disponibles. Luis Fabián Artime había anticipado que “en dos horas se agotaban”, pero finalmente se cortaron unos 9 mil boletos, y la cabecera Willington no se repletó.
Aún así, la recaudación fue millonaria. Solamente con los ingresos de la tribuna destinada a River superó los 100 millones de pesos. “Alcanza para pagar un mes de sueldo del plantel”, puso el parámetro el Luifa, dimensionando el beneficio.
“Demostramos que se puede jugar así en Córdoba. Más allá del costo de las entradas, esto es fútbol, es un espectáculo, y el espectáculo se paga”, cerró el Luifa.
LA “PATERNIDAD” SOBRE RIVER
Desde la inolvidable Promoción en la que Belgrano mandó a River al descenso, el Pirata revirtió las estadísticas, que en los enfrentamientos le eran ampliamente desfavorables. De hecho, en Córdoba le había ganado una sola vez, en 13 partidos y durante 38 años (estadística Mauricio Coccolo).
Desde 2011 a esta parte, Belgrano se impuso en cuatro de los seis partidos ante el Millo. La última vez había sido el 3-2 en 2016. Y refrendó su racha positiva con el 2-0 de este 2023, en su regreso a la Primera División.
