Tres efectivos policiales de la provincia de Córdoba serán sometidos a juicio desde el próximo lunes, acusados de estar involucrados en la muerte del menor David Moreno (13), quien perdió la vida durante un desalojo mientras se desarrollaban disturbios en varios puntos del país el 20 de diciembre de 2001.
La denunciada represión policial ocurrió en las puertas de un supermercado de Villa 9 de julio en Barrio Argüello, mientras la policía intentaba dispersar a un grupo de personas.
Uno de los oficiales imputados es el subinspector Hugo Canovas Badra, señalado como el autor del disparo de escopeta con municiones de plomo, en tanto que las dos otras uniformadas están imputadas por falso testimonio.
El juicio estará a cargo de la Cámara 1 del Crimen de Córdoba, y para Lucas Bruno, responsable de prensa en la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional Córdoba, va a ser "un juicio bastante complicado, porque no están las pruebas tan claras".
Además, Bruno comentó a Télam: "Es una situación extraña que la causa haya estado parada más de 10 años", aunque consideró que "puede ser un juicio ejemplificador".
Hoy se realizó una conferencia de prensa en la Legislatura Cordobesa, en la que participó la abogada querellante, Adriana Gentile, y Rosa Martínez, madre de David, quien expresó: "Creo que va a ser muy difícil condenar a los responsables, al menos que se reconozca que hubo responsabilidad gravísima del estado".
El comienzo del juicio había sido fijado para el 8 de febrero pasado, pero algunas horas antes de ese día desde la Cámara del Crimen decidieron postergarlo para este 17 de abril, por "razones de agenda".
