A Talleres se le desvaneció el sueño copero. Perdió 2-1 con Palestino y quedó fuera de la fase de grupos de Copa Libertadores.
Lo ganaba y sus hinchas deliraban en Santiago, porque coparon el estadio con 5.000 hinchas. La derrota los dejó con las manos vacias, pero con aplausos para el equipo de Vojvoda.
Y el plantel retribuyó ofrendando sus camisetas a la tribuna.