Atención, vecinos de la capital provincial, que este lunes da inicio el monitoreo aédico, campaña destinada al combate contra el mosquito transmisor de dengue, chikungunya y zika.
Los controles domiciliarios se realizarán del 18 al 22 de febrero en distintos barrios de Córdoba y las autoridades provinciales piden la colaboración de los vecinos, con los agentes encargados de revisar los hogares, en busca de los criaderos de mosquitos. En tal sentido se comunicó que promotores de salud y profesionales del Programa de Zoonosis visitarán 600 hogares de 30 barrios de la ciudad de Córdoba, en busca de criaderos de mosquitos y obtener muestras de agua para medir la proliferación de larvas de Aedes aegypti.
¿Cómo identificarlos? Los agentes estarán identificados con chalecos celestes y una credencial personal con los logos del Ministerio de Salud, que incluye nombre, apellido, DNI y foto del promotor.
Los recorridos casa por casa tendrán lugar entre las 9.30 y las 13.
Barrio por barrio. El siguiente es el cronograma del control:
Lunes 18: Crisol Norte, Patria, Ampliación Palmar, Tablada Park, Ramón J. Cárcano, Altos de Vélez Sarsfield.
Martes 19: Jardín, Los Pinos, Granadero, Pringles, Santa Cecilia, Sarmiento, Cabo Farina.
Miércoles 20: Alto Alberdi, Patricios Norte, Altos San Martín, Rivero Indarte, Villa Argentina, Ampliación Matienzo.
Jueves 21: Parque Capital, Panamericano, Lourdes, José Hernández, Parque Alameda, Congreso..
Viernes 22: Providencia, Residencial América, Bajo Palermo, Nicolás Avellaneda, Parque Don Bosco, San Ignacio.
Resultados de enero: El primer monitoreo aédico de 2019 arrojó un índice de vivienda de 28 por ciento. 28 de cada 100 viviendas visitadas tenían al menos un recipiente con larvas de aedes aegypti. Este valor indica un nivel alto de riesgo de transmisión viral de acuerdo a las estimaciones de OMS/OPS, señalaron las autoridades provinciales.
En cuanto al detalle por zona de la ciudad, los índices fueron: Noroeste 23 por ciento; Noreste 26; Centro 28; Suroeste 27 y Sudeste 35.
Los objetos en los que se encontraron larvas de aedes con mayor frecuencia fueron: recipientes con plantas, baldes y tarros; seguidos de portamecetas y bebederos de mascotas.
Se encontraron potenciales criaderos en casi la totalidad de las viviendas visitadas (99 por ciento).
