La Policía sigue en búsqueda de Raúl Orlando Márquez, el hombre acusado de asesinar al jubilado Bruno Octavio Picco (68) en barrio General Paz, el jueves pasado.
El fin de semana cayó un sospechoso: Claudio Miguel Oliva fue imputado por "homicidio en ocasión de robo", acusado de conducir el vehículo en el que se movilizaban los motochoros.
Mientras tanto, la familia Picco sufre. El hijo del jubilado, Ariel Carlos Picco, posteó en su Facebook dos cartas donde despide a su padre y comparte el dolor y la indignación que siente por el asesinato, los criminales y el accionar de la Justicia.
"Hoy velé a mi papá porque dos delicuentes lo asesinaron a sangre fría. Según la testigo que declaró, el asesino después que le disparó en la pierna mi papá le entregó todo al delincuente, agarró la mochila, siguió y se volvió a fusilarlo de un disparo en la cabeza de mi papá, lo hizo con alevosía y sin corazón. Con un solo disparo en la pierna hoy lo tendría en el hospital mimándolo y contando un hecho del pasado", relató.
"El miércoles 14/02/2019 mi papá estaba contento, vivo, con ganas de pasar tiempo con sus hijos y nietos, organizando los próximos meses y años hermosos en familia y con los seres queridos que lo amábamos tanto. Los fiscales y Policía de Córdoba y Gobierno provincial sólo se preocupan de los votos, no de la buena gente y trabajadora", posteó en otra ocasión.
"Yo hoy 16/02/2019 estoy enterrando a mi amado papá y abuelo ya que esta gente dueña de lo ajeno ni siquiera tiene corazón, no sólo por lo que está haciendo, si no por las vidas que está arruinando y la Justicia solo es un organismo unidireccional, solo sale a defender lo indefendible. Despertemos como sociedad, como personas. Los derechos y obligaciones son para todos, no hay excepciones y la Policía y Justicia y la gente de los derechos humanos solo se mueve cuando a ellos le conviene", añadió.
(Foto de portada gentileza ElDoce.tv)