Como si se tratara de un partido de local en el Estadio Mario Alberto Kempes, en pocas horas los hinchas de Talleres agotaron este miércoles las entradas que estaban disponibles (unos 3.000 lugares) para el partido contra San Pablo, en la revancha de Fase de Grupos por Copa Libertadores que se jugará en el Morumbí.
Desde la dirigencia de la T se están realizando gestiones procurando conseguir algunos tickets más para aquellos que se quedaron sin la posibilidad de comprarlo.
Pero, de acuerdo con lo informado por Mitre 810, un grupo de barras de Talleres llegó poco antes de que se agotaran las entradas y, llamativamente, se cerraron las ventanillas luego de que ellos ingresaran y, aparentemente, ejercieran alguna presión en ese lugar.
A partir de ese momento y a los pocos minutos se colocaron los carteles que informaron que no había más tickets.
Allí se registró la amargura de los hinchas que estaban haciendo cola y se quedaron sin nada.
De acuerdo con lo informado por el enviado especial de ese medio a Brasil, Federico Jelic, varias personas le informaron que les ofrecieron las entradas a 400 reales, cuando en la ventanilla se pagaba 90 reales por cada una.
Pero además, también hay informaciones vinculadas con supuestos "pagos de peaje" por aprietes de la barra a los micros que llegaron a San Pablo.
Lamentable.