En enero de este año, en ocasión de unos trabajos de pintura, se decidió retirar informalmente los crucifijos del Colegio Monserrat. A partir de ahí, se generaron posturas encontradas sobre si había que restituirlos o dejarlos definitivamente afuera de las aulas.
En la institución, declarada Patrimonio Cultural por la Unesco, los crucifijos serán restituidos, según decidió el Consejo Asesor del Colegio preuniversitario, pese a la oposición de determinados sectores educativos.
El director del Monserrat, Aldo Sergio Guerra, se encontró con una situación particular una vez que ordenó retirar informalmente los crucifijos para los trabajos de albañilería, informó La Voz del Interior.
Federico Sartori, responsable del Archivo Histórico del Monserrat, argumentó a favor de quitar las cruces del colegio, haciendo hincapié en que es una institución laica y pública. En una nota elevada este mes al director, sostuvo: "El Monserrat es, ante todo, una institución educativa. Y su educación de nivel secundario y de pregrado no presenta contradicciones ni confusión alguna al respecto de su carácter público y laico, así como tampoco de su orientación humanista".
"En tal sentido, no se dicta en su plan de estudios ninguna materia concerniente a la catequesis, la evangelización ni a la educación de ninguna creencia religiosa", añadió.
En la otra vereda estuvo la profesora de Historia Carolina García Montaño, quien consideró que "la presencia de una imagen religiosa, como los crucifijos, en nada contradice la educación laica que ofrece el colegio sino que responde a un reconocimiento de su pasado confesional".
"Reconocer la historia como elemento constitutivo de la identidad es un acto de madurez de los pueblos", explicó García Montaño.
Finalmente, el Consejo Asesor se inclinó al pedido de la profesora.