Tomás Lacase (21), el joven cordobés que en enero estuvo en coma tras ser golpeado en la cabeza por un mendocino en Punta del Este, a la salida de una disco, recibió el alta definitiva y su familia dijo que fue un "milagro" y se mostró feliz en las redes sociales.
"Pasaron casi 6 meses y mucho antes de lo pensado e imaginado te dieron el alta en el centro de rehabilitación!!!! Que milagro Tommy!!!", expresó su papá, Bernardo Pío Lacase, y agradeció al apoyo de la familia y los amigos "incondicionales e irremplazables".
"Pero quiero decirte que el gran responsable del milagro fuiste vos, quien asumiendo con una paz indescriptible, sin rencores ni odios por lo sucedido, nos mostró el camino hacia donde debíamos enfocarnos, que era sólo tu salud, recuperación y felicidad. No se cómo, pero siempre dijiste y supiste que te ibas a recuperar, jamás dejaste de ir a tus sesiones de rehabilitación, y sin ninguna queja buscaste además otros métodos para mejorar.... y LO LOGRASTE!!!", posteó.
Y siguió: "Qué orgullo y admiración siento!! Cuánto me enseñaste en este tiempo, tal vez mucho más que lo que yo pude en 20 años. Qué paz me da saber que los valores que siempre intentamos inculcarte los has recibido y aumentado. Ese es nuestro éxito, lograr que nuestros hijos sean personas de bien".
Por último, dedicó un mensaje a quienes atacaron a su hijo: "Dios quiera que la/s persona/s que te agredió, también haya aprendido de este hecho lamentable, porque a ėl la vida también le dio otra oportunidad, y si la sabe aprovechar seguramente se transformará en una gran persona".
En enero, Tomás Lacase, un joven estudiante de la Universidad Siglo XXI y domiciliado en Villa Allende, quedó en coma al ser golpeado en Punta del Este. Luego de pasar varios días internado en Uruguay, fue enviado a Córdoba para su rehabilitación que demandó varios meses.
El agresor fue Bernardo Alcanoni (29), un abogado mendocino que fue imputado por lesiones graves por la Justicia del país vecino. Finalmente, un juez suspendió la causa luego de que Alcanoni reconoció su culpabilidad y accedió a compensar económicamente a la familia Lacase, algo que posibilita la ley penal uruguaya.