Instituto lo ganó al final y hay alivio en Alta Córdoba, porque el público perdía la paciencia. Javier Mendoza fue de lo mejor del equipo, y destacó: "Nosotros no podíamos estar nerviosos. Había que ganar y por suerte Víctor (López) metió la cabeza al final y fue un desahogo para todos", sintetizó.
"Me sentí bien en lo individual y en el mano a mano. Lo importante es que mi juego le sirvió al equipo", añadió.
Y destacó: "Lo ganamos por los huevos que tiene este equipo. Huevos para pedirla, para tenerla. Porque pegar y correr, lo hace cualquiera".
A su vez, Ignacio Antonio también se destacó y afirmó: "Había que ganar, por golear o sobre la hora. Lo necesitábamos y nos sacamos un peso de encima".