Por Jorge Nahúm.
Reforzar la ofensiva, la premisa de Instituto. Por eso Darío Franco había pedido un delantero de Primera y hubo sondeos por Fabián Bordagaray. El actual jugador de Defensa y Justicia respondió que no quiere jugar en la B Nacional.
Ante esto, el club de Alta Córdoba volvió a la carga por Nery Bandiera, a quien Franco dirigió en Aldosivi. Los primeros intentos chocaron con la negativa de Belgrano, pero como el Celeste incorporó a Jonás Aguirre las chances de Bandiera de volver a ser tenido en cuenta se redujeron, por lo que podría haber una negociación.
Instituto apunta a los dos refuerzos que le permite el reglamento y vale recordar que ya consiguió al primero, al volante por izquierda Javier Mendoza, ex Chacarita.
La depuración en el plantel fue profunda, ya que además de los cuatro jugadores dados de baja en noviembre se fueron Ricardo Blanco, Guido Mainero y Ezequiel Videla.
La partida de Videla, a Guaraní de Paraguay, y de Germán Lesman, a Almirante Brown de Adrogué representan un ahorro significativo para Instituto, ya que entre los dos sueldos sumaban unos 400 mil pesos.
En el caso de Videla se fue con rescisión de contrato y a cambio de una deuda salarial, cercana a 500 mil pesos.