Incluso en el contexto de aislamiento social por la pandemia, la inflación persiste. Ni las tarifas congeladas, ni el combustible con el mismo precio desde principio de año y nisiquera el párate general de actividades, pudieron frenarla.
Si bien los datos oficiales se conocerán la semana que viene cuando el Indec y la Dirección General de Estadística y Censos de la Provincia (DGEC) publiquen sus informes, ya hay estimaciones que hablan de lo sucedido en materia de precios en Córdoba.
Las estimaciones que hace mensualmente el Ministerio de Finanzas provincial, arrojan que la inflación en la ciudad de Córdoba habría sido del dos por ciento. Es un incremento que, de confirmarse, marcará una leve disminución en relación con marzo, cuando fue del 2,49 por ciento.
El dato de abril surge del informe sobre la recaudación del mes pasado, publicado esta semana por el organismo que lidera Osvaldo Giordano y que utiliza como insumo la tasa de inflación adelantada por la DGEC.
También el informe de Finanzas muestra la caida abrupta de los ingresos provinciales.
El documento advierte una inflación interanual en Córdoba del 45,6 por ciento, por lo que se desprende una suba mensual en abril del orden del dos por ciento.
De confirmarse, en lo que va del año la suba de precios habría sido del 10,6 por ciento, un porcentaje alto si se tiene en cuenta que las tarifas de los servicios públicos están congeladas en un escenario dominado por la pandemia de coronavirus y el aislamiento.