Pablo García es cordobés y ex combatiente de Malvinas. Partió de la plaza de Argüello el 8 de diciembre pasado para iniciar una travesía hasta el norte del continente. Pablo se quedó varado en Lima, Perú. La pandemia del coronavirus frustró sus planes de llegar a Alaska.

"La pandemia me agarró en Lima, y decidí volver porque la cosa se empezó a poner fea. Regresé hasta Desaguadero, una ciudad chica, en el límite entre Perú y Bolivia, y acá quedé… desde hace 32 días, haciendo cuarentena en un hostel junto a otros cinco argentinos", comentó Pablo a La Voz.
"Me preocupa mi salud", admite el hombre de 58 años ya que padece asma bronquial y tiene una neuropatía en los miembros inferiores la contrajo por haber estado en la guerra, sumado a una patología renal. A 3.800 metros por encima del nivel del mar, el malestar se le acrecentó.
Ante la ausencia de respuestas del Estado, Pablo, publicó un tuit en pedido de auxilio: “Argentina, sobreviví a Malvinas por defenderte, no quiero morir en Perú porque me abandonaste”
Sobre su estadía en el hostel contó: "En realidad acá está todo cerrado, pero la dueña ha tenido muy buena voluntad con nosotros sabiendo que no tenemos sino en donde alojarnos, y nos ha permitido quedar a un precio razonable. Nos turnamos entre nosotros para salir a hacer compras, y nos ocupamos de hacer la comida. Sólo queda una pareja que se ocupa de la limpieza y que estarán hasta mañana", relata.
En el hostel, además de Pablo, hay una pareja de Jujuy, otra de Santa Fe, y un argentino radicado en Estados Unidos desde el año 2000 que está haciendo la travesía en moto en sentido opuesto, con Argentina como destino final.

Pablo está casado con Julieta, tiene dos hijas –Luciana y Sofía- y dos nietos que ansía poder abrazar pronto. "Estamos encerrados en Perú, imposibilitados de movernos", cuenta, y dice que las gestiones diplomáticas no han tenido ninguna respuesta todavía.
Para volver a su casa el cordobés necesita necesita que la diplomacia gestione permisos para que puedan trasladarse por Perú y regresar a Argentina "Tenemos motos o autos para movernos, no necesitamos traslados ni dinero, sólo que nos gestionen los permisos para poder transitar hasta llegar a nuestro país, y a nuestras respectivas provincias", reclama.