El pequeño estaba entre sus compañeros, entre llantos, lágrimas, ansiedad y alegría decidió tomar la palabra y darle aliento a sus amigos antes de la final. Se trata de un cordobesito de 11 años que se hizo viral y cuyo video tiene una historia muy fuerte detrás.
El pequeño se llama Luciano Nievas, es el capitán de la selección de Córdoba de fútbol y él junto a sus compañeros se preparaban para disputar la final de un torneo que se jugó en Chile.
"No quiero perderlos, son mis hermanos. Convivieron 10 días conmigo. Mirensé sus caras, es nuestro último partido juntos. Escuchenmé, hoy es la final. Muchachos ¿vamos a ganar?, ¿vamos a dejar todo?. Dejemos de llorar porque esto lo sentimos cada uno. Nadie quiere perder", se lo escucha decir.
En la previa del partido, y casi como si fuera un adulto, empezó a arengar a sus compañeritos. Algunos se emocionaron y comenzaron a llorar. Al parecer, el mensaje les llegó a todos ya que el resultado final fue victoria para Córdoba por 7-0.
Pero este video y la forma en la que el pequeño se expresa tiene una particular historia detrás. Según declaró el papá de Luciano a El Doce, el niño perdió a su mamá cuando él tenía 2 años.
"Su liderazgo se debe a que tuvo que madurar más rápido que otros debido a las circunstancias que atravesó", declaró Sergio. La mamá de Luciano falleció por un aneurisma cerebral. Antes de viajar el niño pidió ir al cementerio a visitarla.
El video se hizo viral y en diferentes cuentas de fútbol o de deportes se podían ver las imágenes del pequeño Luciano.