Durante un tiempo, una cordobesa se transformó en el blanco de los medios de comunicación y los portales vinculados por las noticias de espectáculos porque se había casado nada menos que con Matías Alé.
Todo terminó cuando Matías tuvo un brote psicótico en 2015 que motivo su internación y posterior tratamiento.
"Ella se fue, me abandonó. Yo no fui el que tomó la decisión de separarnos. Estuve internado desde el 3 de noviembre al 15 de diciembre de 2015 y cuando salí nos fuimos a pasar Navidad y Año Nuevo a Carlos Paz porque ella es cordobesa. Cuando volvimos estaba recién salido de la clínica, o sea que no estaba bien, parecía una bolsa de papas medicado", dijo Alé en su momento sobre la separación.
Ante semejantes declaraciones la modelo se vio en la obligación de aclarar que "no fue un abandono como el dice" sino que ella había decidido "dar un paso al costado" por la salud de ambos.
"En septiembre va a cumplirse un año desde que llegué. Vine por trabajo y a los dos meses de estar aquí tomé la decisión de quedarme a vivir y probar suerte", dijo María a Papparazzi
Y agregó: "Necesitaba llevar una vida tranquila, ya estaba cansada de escuchar lo mismo en los medios, que cuando quieren son muy duros".