Antonella tiene puesta una pechera roja de la empresa que no deja duda sobre su identificación. Aguarda puntual “a las 11 desde el monumento de la Plaza San Martín”, como especifica el inicio del tour por redes sociales. Ella tiene 23 años y con una sonrisa le da la bienvenida al grupo de turistas que –sin reserva o anticipación– va dando su presente a la cita.
El contingente, pese a que es época invernal, llega a las 17 personas provenientes de Alemania, Bélgica, Nicaragua y Hungría entre otros.
Al comenzar –en un inglés fluido que todos en el grupo entienden–, la joven explica que “Docta Free Walking Tour” es una movida mundial para conocer las ciudades.
La misma se brinda caminando y el costo depende de la voluntad del viajero: “ Yo me quiero hacer millonaria, por lo que les pido que al finalizar el tour que será de 2 horas y media, dependiendo de lo que ustedes consideren y lo bien que la hayan pasado sean generosos”, dice entre risas causando empatía en el grupo.
El paseo se hace íntegramente en inglés –salvo que se deba traducir en español– y la oferta de este emprendimiento que lleva sólo dos años en la ciudad ofrece dos opciones de lunes a lunes y no se suspende por lluvia (salvo granizo).
Por la mañana, Centro Histórico que sale desde Plaza San Martín e incluye Catedral, Museo de la Memoria, Museo de la Cripta, edificio La Mundial y Manzana Jesuítica.
Por la tarde, a partir de las 17, el recorrido comienza en Palacio Ferreyra, con visita a los barrios modernos y bohemios como Nueva Córdoba y Güemes, finalizando con unas copas en un bar para los que buscan hacer amigos.
“La gente elige este tipo de propuestas desestructuradas por lo económico, ya que con lo poco o mucho que tienen de dinero pueden conocer la ciudad que visitan. Y principalmente porque no deben contratar nada y, llegue cuando llegue, siempre va a encontrar un recorrido a mano”, sostiene Antonella Pinotti, una de las siete guías con las que ya cuenta la propuesta que se anima a crecer en la ciudad de Córdoba.
Sueños de emprendedores. Detrás de los recorridos está Stefano Rivelli, un joven estudiante que junto a su amiga Daniela Vaca se arriesgó a ofrecer Free Walking Tour en la Docta.
“Se nos ocurrió porque veíamos que en Córdoba no había propuestas de este tipo. Sólo un colectivo, y con días y horarios específicos”, relata Stefano sobre el despertar de la idea.
Sin duda nuestra ciudad es cuna de emprendedores y un lugar donde se prueban algunas tendencias mundiales: “Esta movida viene de Europa.
Las personas se sienten atraídas por viajar y quizás están sólo uno o dos días en un lugar. Acá no había mucho para ofrecerles”, comenta sobre el nicho encontrado frente a la ausencia de ofertas.
Y la idea se puso en marcha, primero ofreciendo el servicio en hostels, repartiendo folletos y teniendo de aliadas a las redes sociales: “Todos empezaron a coparse y a darse cuenta que podía funcionar. Iniciamos con una idea que se fue transformando en algo que funciona, le sirve a la gente que nos visita y nos da una puerta laboral”, explica.
A la gorra, por la city. La visita por las calles cordobesas se va desarrollando de modo singular. No sólo se trata de compartir con los turistas aspectos históricos, sino cuestiones relacionadas con la cultura típica cordobesa.
“Acá tomamos ‘ferné’ y siempre va combinado con Coca Cola. 30 y 70 es la medida justa”, explica al grupo Antonella como una verdadera experimentada.
La respuesta es inmediata: risas y preguntas sobre dónde se puede comprar ese elixir. Pero aún más se sorprenden cuando llega el momento de explicar sobre el “Prittiau” –bebida mezcla entre vino y gaseosa de limón– o la certeza de que Córdoba es la cuna del mejor choripán de todo el mundo.
"Todos la pasan muy bien, y en general se sorprenden con algunos detalles. Entre ellos, destacan la cantidad de lugares históricos que tenemos; la historia del edificio más angosto de Latinoamérica y más aún cuando les explicamos que en Argentina la Universidad es gratuita", comparte la guía que acompañó el recorrido tomado por Día a Día.
La propuesta es bien recibida por los turistas, que conocen esta movida principalmente por Internet. Recorren y preguntan, no sólo sobre los lugares a visitar sino detalles de lo cultural y modos de vida.
“Nos encanta hacer este tipo de tours porque hablamos con jóvenes y de modo divertido sabemos qué hay. Además conocemos otros turistas.
Nos han tratado muy bien y nos vamos con ganas de saber más”, cuentan Diana y Ana Laura, de Costa Rica, quienes llegaron hace dos días y a la noche tienen pasaje para continuar el viaje por Argentina.
El reloj marca más de dos horas de caminata, y la despedida es en la Plaza Vélez Sársfield. Allí, Antonella propone el fin, no sin antes “tirar” unos pasos de la música popular cordobesa: el “cuarteto”. Pone música y como si nadie los viese, el baile se apodera del grupo y ya no hay inhibición que valga.
Tras el aplauso generalizado los turistas, en ocasiones muy generosos, despiden a la guía con la propina que les permite el bolsillo.