"El Servicio Penitenciario de Córdoba informa que a raíz de un video casero que fue difundido por un medio de nuestra ciudad, se procedió a identificar a los internos que participaron de la filmación mientras tenían conductas inapropiadas con otro interno en el establecimiento carcelario de Bouwer".
"También, a través de una requisa se pudo encontrar el celular y determinar a qué interno pertenecía".
Los mensajes de arriba son parte de un comunicado difundido por el Servicio Penitenciario de Córdoba luego de que Canal 10 difundió un video casero en el que un grupo de presos tortura a otro en Bouwer.
El interno es atado y vejado por otros reclusos, sin que intervenga ninguna autoridad.
Adriana Rearte, de la Mesa Nacional contra la Violencia Institucional, calificó lo sucedido como una "tortura directa", y explicó que las cárceles ya no son un lugar de reinserción social de los internos porque "están todos mezclados: condenados con procesados, menores de 21 años con mayores, narcos con asesinos y así, en defintiva, las cárceles son una universidad del crimen".
Ante esto, desde la Mesa Nacional se solicitó la intervención del Servicio Penitenciario de Córdoba.