El búfalo de agua (Bubalus bubalis) posee las mejores características anatómicas y fisiológicas para la gestión de vegetación en humedales,debido a que las articulaciones de sus patas tienen la cualidad de ser más flexibles y le permiten girar 180º., dándole la capacidad de caminar por tierras pantanosas y anegadas sin riesgo de quedarse pegado mientras pastorea.
Sus pezuñas tienen gran dureza y no se deforman ni se ven afectadas por hongos y bacterias; a la vez es un buen nadador.
Es menos selectivo en el pastoreo que los vacunos por lo que en su dieta incluye más especies de vegetación del humedal; tiene un aparato digestivo capaz de digerir y aprovechar forrajes de baja calidad, incluyendo recursos fibrosos.
Tiene el rumen más grande que el bovino, lo que le permite almacenar más alimento durante el pastoreo; además en su rumen tiene 10% menos de bacterias productoras de gases, por lo que produce menos gas metano.
En el manejo ordinario, necesita agua para beber, sombra y comida
Los cercos permiten confinar a los búfalos en áreas específicas de mayor interés para ser rehabilitadas Con el cerco eléctrico, el búfalo es funcional, fácil de manejar y mantener, incurriendo en menores costos de instalaciones, con un mínimo impacto en el paisaje y en el tránsito de la fauna silvestre.
De preferencia los animales deberían ser descornados desde su nacimiento y mantener un hato de animales adultos, incluyendo una hembra y el macho líder con cuernos, para efectos de seguridad y protección.
Los humedales, por su naturaleza, presentan una dinámica de continuo crecimiento de pastos, herbáceas y arbustos; y la ausencia de pastoreo a menudo ha llevado a que muchos de ellos sean invadidos por exceso de vegetación, con la consecuente pérdida de características ecológicas de interés para conservación.
Mediante el pastoreo se remueve la biomasa vegetal y se establece el control de la sucesión de esa vegetación invasora, se exponen los espejos de agua y se rehabilitan funciones ecológicas del ecosistema; a la vez se genera producción ecológica. Eso es concordante con las políticas de la Convención Mundial de Humedales, en el marco de sostenibilidad y uso racional de los recursos en humedales.
En esas condiciones de pastoreo, la producción es orgánica y hasta certificable, en correspondencia con una corriente de mercado que demanda productos ecológicos u orgánicos, como lo son la carne y la leche procedentes de esta forma de ganadería, dentro del marco de acciones a favor del ambiente.
Por todo eso y bajo un esquema de buen manejo, queda demostrado que el búfalo es la especie estrella para la gestión de vegetación en humedales tropicales.
Con manejo adecuado, el búfalo de agua remueve y mantiene bajo control la vegetación invasora, abre los espejos de agua y propicia la llegada de diversidad y abundancia de aves acuáticas, lo que contribuye a rehabilitar y conservar humedales.
