El médico que mató a un ladrón en Loma Hermosa fue declarado "no culpable"

El juicio por jurado popular definió que Lino Villar Cataldo actuó "en legítima defensa".

Lino Villar Cataldo.
Lino Villar Cataldo.

El médico Lino Villar Cataldo fue declarado este jueves por un jurado popular "no culpable" de matar a balazos a un delincuente que en 2016 lo asaltó en su casa de la localidad bonaerense de Loma Hermosa.

"Lo felicito. Sepan que él es portador de tres armas y con una de esas mató a mi hijo. Va a seguir matando", aseguró la mamá del ladrón.

La jornada inició a las 9 de la mañana en la sede del Tribunal Oral Criminal (TOC) 3 de San Martín, a cargo de la jueza Carolina Martínez, donde los jurados populares designados para el debate dieron a conocer su veredicto por la tarde.

El miércoles, Villar Catalaldo dijo que defendió su vida cuando vio "de cerca a la muerte" y aseguró que "jamás" tuvo intención "de matar a nadie".

Lino Villar Cataldo, el médico que mató a ladrón (Foto: Archivo Vía País).
Lino Villar Cataldo, el médico que mató a ladrón (Foto: Archivo Vía País).

"Efectué disparos porque sentí que en ese momento me mataban, hubo amenaza verbal en todo momento, 'te voy a matar hijo de puta', y me apuntaba con ese pistolón que asusta a cualquiera", sostuvo el médico al referirse al momento en que disparó contra el ladrón Ricardo Alberto "Nunu" Krabler (24).

Lino relató de frente al jurado popular la situación que vivió el 26 de agosto de 2016 y respondió las preguntas de la fiscal Noemí Carreira, de su defensor Diego Szpigiel y del representante de la madre de la víctima, Juan Carlos Maggi.

Según su testimonio, él había comprado una pistola calibre 9 milímetros que registró "en forma legal" porque había sido "asaltado en siete ocasiones", dos de ellas en su vivienda bajo la modalidad de "entradera".

Villar Cataldo aseguró que el arma "siempre estaba guardada en un cajón" de su consultorio y esa "fatídica noche" había terminado de trabajar como lo hacía habitualmente, tras lo cual sacó el Toyota Corolla a la vereda y conversó con un vecino que había llegado momentos antes.