El video de un enfrentamiento entre un taxista y un conductor, ocurrido este sábado en el barrio porteño de Villa Urquiza, se viralizó en las redes sociales y generó una profunda indignación.
Las violentas escenas muestran cómo los hombres se enfrentan a las piñas y con golpes a sus propios autos. De los dos involucrados, el taxista fue el más violento, y antes de retirarse retrocedió a gran velocidad con su vehículo y chocó fuertemente al otro auto, incluso con su mujer y su hijo pequeño arriba del mismo.
Según dijeron desde la cartera de Transporte porteña, la licencia de Claudio Rímolo será suspendida preventivamente hasta que la Justicia dictamine su culpabilidad. El hombre trabaja conduciendo el taxi, que es propiedad de María Lucila Balton, quien se presentó voluntariamente en la comisaría de Villa Urquiza para colaborar con la identificación del violento.
El hecho ocurrió en la esquina de avenida Triunvirato y La Pampa y este lunes Norberto Brotto, fiscal a cargo del caso, anticipó que el agresor podría afrontar una pena máxima de dos años de prisión -excarcelable- teniendo en cuenta que los delitos que se le imputan son "lesiones" y "daños".
"El único imputado es el taxista porque, más allá de que haya habido una pelea y el otro conductor –Fabio Rojas- sea responsable por otras circunstancias, lo que se analiza es la reacción, los daños provocados en el otro auto y las lesiones", explicó Brotto en diálogo con radio La Red.
Por su parte Martín Francolino, abogado de Rojas, adelantó que solicitarán la inmediata detención del taxista y buscarán agregar la "tentativa de homicidio" los cargos que ya se le imputan.
Rojas, en tanto, reconoció en diálogo con TN: "No me mató por un segundo. Podría haber desnucado a su hijo y a su mujer en esa maniobra hacia atrás, y tampoco le importó".
"Esta vez no prediqué con el ejemplo. Me dio mucha bronca que me rompiera el auto, por eso mi reacción. Pero ahora que lo pienso jamás volvería a insultar. Creo que si tenía un arma me pegaba un tiro", cerró.