Daniel Oyarzún, el carnicero que persiguió, atropelló y mató a un ladrón en Zárate, fue absuelto luego de que un jurado popular determinara que no fue culpable de la muerte de Brian González. Oyarzún quedó en libertad.
El fiscal José Luis Castaño había pedido que sea condenado por "exceso en la legítima defensa", mientras que la querella pidió el homicidio simple, y la defensa había solicitado su absolución. El debate se desarrolló desde el lunes pasado en el Tribunal Oral en lo Penal N° 2 de Campana.
Antes del veredicto, el carnicero había dicho sus última palabras mientras lloraba desconsoladamente: "Confío en la justicia. No soy un asesino como todos me marcan. Lo que sucedió no lo busqué. Solo espero de ustedes que me dejen disfrutar de mi hija".
Al salir del Tribunal y con gran cantidad de personas mostrándole su apoyo, Oyarzún dijo emocionado que "se hizo justicia", y tras agradecer por su libertad aseguró: "nunca fui justiciero, siempre fui laburador".
El 13 de septiembre de 2016, Marcos Daniel Alteño entró armado a la carnicería de Oyarzún y se llevó unos 5 mil pesos. Afuera, para ayudarlo a escapar, lo esperaba Brian González en su moto. El carnicero los persiguió y a unas 3 cuadras del lugar chocó contra el ciclomotor.
Gónzalez quedó atrapado entre la trompa del auto y un poste. Entonces Oyarzún y otros vecinos le dieron una paliza. Todo quedó registrado por las cámaras de los teléfonos de varios testigos.
