Este martes, los médicos del sanatorio de Ramos Mejía, Buenos Aires, dieron el alta al niño de meses de vida que fue arrojado por la ventanilla de un auto que fue robado.
Desde la clínica La Trinidad consideraron que la vida de Mateo, el pequeño de cuatro meses, no corría peligro, por lo tanto la madre, que fue asaltada el domingo, pudo llevárselo a su casa.
Matero, fue arrojado del auto de su mamá cuando fue robado por delincuentes en la esquina de las calles Pringles y General Conesa.
Los dos ladrones escaparon con la camioneta y llevaron en su interior al bebé, que estaba en una sillita. Al advertir su presencia, lo lanzaron a la calle desde una ventana y huyeron.
La palabra de la mamá
"Estaban armados y sacaron el arma incluso después de que les entregué la llave del auto", dijo Luciana en la puerta del sanatorio donde Franco, su hijo, está en observación."Ellos querían robar el auto, no les importaba nada", agregó.
Los ladrones, según señaló, "tenían entre 17 y 18 años".
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