En la ciudad de Buenos Aires, entre abril y junio, los ingresos de los 1,3 millones de hogares cayeron 17,3% con relación a la inflación, y 15,5% en términos nominales, según datos de la Dirección de Estadística y Censo porteña, difundidos por Clarín.
En el segundo trimestre de 2020, el ingreso total familiar en CABA fue de $63.008. En los primeros tres meses había sido de $74.624 y un año antes $55.461. Así, la variación interanual fue de apenas el 13,6%, frente a una inflación en 12 meses a junio del 37,4%. En términos reales es un retroceso del 17,3%, explica ese diario.
En este descenso quienes resultaron más perjudicados fueron los sectores de ingresos más bajos -250.000 hogares donde habitan 550.000 personas-, con un promedio inferior a los $19.032. En general, en la zona Sur se perciben ingresos familiares 40% inferiores a los de zona Norte.
“A pesar de las medidas de emergencia implementadas, el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) dirigido a la población trabajadora informal (incluyendo monotributistas) y el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) dirigido a la población asalariada formal del sector privado y a la que realiza trabajo por cuenta propia registrado, el ingreso medio de la población, el Ingreso Total Familiar (ITF) y el Ingreso Per Cápita Familiar (IPCF) presentaron caídas respecto de los valores del trimestre inmediato anterior y exhibieron las menores variaciones interanuales de la serie", dice el informe del Gobierno porteño.
"Solo el ingreso medio de la ocupación principal pudo escapar a esta lógica y esto se debe particularmente al resultado observado para la población asalariada formal y de mejores ingresos, que compensó los malos resultados de los restantes sectores (empleador/a o cuenta propia)", explica.
Los cuentapropistas, uno de los grupos más afectados por el aislamiento por la pandemia de coronavirus, "por primera vez en la serie exhiben una variación interanual negativa (4,6%), el ingreso promedio fue de $32.776", dice el informe, lo que representa en términos reales una caída del 30%.
Continúa el texto: "La emergencia sanitaria empujó a muchas personas ocupadas hacia la inactividad. Especialmente perjudicadas en términos de empleo fueron las personas asalariadas no registradas y las que trabajan por cuenta propia. En la medida en que esa población se concentra en los deciles de más bajos ingresos son estos los que reflejan el peor comportamiento".
Paralelamente, aumentó el número de hogares que quedaron totalmente sin ingresos. "Fueron 48.201 hogares exhibiendo un incremento muy importante respecto a igual trimestre del año anterior (9.655): más de 38.000 hogares se quedaron sin ingreso como consecuencia de las medidas de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. De esta manera, se encontraron 94.741 personas sin ingresos: se sumaron 77.367 personas comparándolo con el mismo trimestre del año anterior (17.374)".