La histórica estación Constitución, que cumplió 130 años en enero, ya está en proceso de renovación. Los planes incluyen restaurar las tres fachadas, mejorar el hall central y modernizar el subsuelo que conecta con la línea C de subte, que actualmente se encuentra colapsado. Desde el Gobierno nacional estimaron que las obras estarán listas para mediados de 2018.
Luego de la puesta en valor de Retiro, las obras comenzaron en el otro gran centro de trasbordo de la Ciudad. Sólo por la estación ferroviaria del tren Roca circulan medio millón de personas cada día, por lo cual -si bien la última restauración ocurrió en 2005- los signos de deterioro se hicieron evidentes.
En las últimas semanas los usuarios se encontraron con los primeros cambios. Dos enormes andamios de hierro desembarcaron en el medio del hall central, a fin de que los operarios revistan las paredes, impermeabilicen los techos y reemplacen los paneles de vidrio rotos de los laterales y de la cúpula. Habrá más luz natural, que se complementará con las nuevas luminarias Led.
El problema es el mientras tanto, ya que se restringió el área de circulación y en horas pico se amontonan los miles de usuarios del subte y el tren. También se limitó el uso de las escaleras mecánicas que están más cerca de la entrada de Hornos.
Una vez que terminen con esta parte de los trabajos, continuarán con el recambio de baldosas y la instalación de asientos, pantallas LED interactivas y más puntos de recarga para la tarjeta SUBE. Las boleterías antiguas serán restauradas y el clásico cartel con los horarios de los trenes será reemplazado por una pantalla de última generación. El acceso desde Brasil, conocido como “Patio de los leones”, por sus esculturas, será reacondicionado y sumará locales comerciales.
Las obras también alcanzan el subsuelo de conexión con la línea C, que tendrá más iluminación y será ampliado. Por lo pronto, ya sacaron los locales comerciales de uno de los costados del corredor, lo que generó más espacio para circular. Luego serán reubicados. Además, repararán las escaleras mecánicas, habilitarán un ascensor, renovarán los baños y abrirán otra boletería.
El edificio original de la estación fue inaugurado en 1865, pero después fue ampliado en otras oportunidades hasta llegar al diseño actual.
Fue inspirado en el castillo francés de Maisons-Laffitte y es un símbolo del patrimonio porteño.
La Razón para ViaPais.