Un estudio de la Universidad de Kent, en el Reino Unido, determinó que el coronavirus ya existía en China desde octubre de 2019.
//Mirá también: Coronavirus: el Gobierno prorroga las restricciones y reduce el cupo de ingreso al país a 600 pasajeros diarios
Para China, el primer caso identificado de COVID-19 se conoció en diciembre pero ahora utilizaron para el análisis un método que se emplea para datar extinciones de especies.
El análisis se basó en un modelo matemático que publica la revista especializada “Plos Pathogens” y su estudio sugiere que “la expansión del virus se produjo mucho antes y más rápido” de lo que implican los casos confirmados.
La investigación estuvo encabezada por David Roberts y un equipo integrado por británicos, estadounidenses y checos.
Utilizaron para el análisis un método de la ciencia de la conservación que se usa para datar extinciones de especies, y los datos procedían de la base de estadísticas en tiempo real Woldometers.
//Mirá también: Vizzotti anunció que a partir de julio llegan 24 millones de dosis de Sinopharm
Así estimaron que la enfermedad se habría extendido a nivel mundial en enero de 2020 y que el primer caso fuera de China se habría dado en Japón el 3 de enero de 2020. El recorrido habría continuado desde el este de Asia para llegar a Europa, con el primer caso estimado en España el 12 de enero de ese año.
Por otra parte, la investigación afirma que el SARS-Cov-2 llegó a Estados Unidos el 16 de enero de 2020; a Australia, el 23 de enero; a África, el 9 de febrero en Nigeria; y a Sudamérica, el 19 de ese mes en Brasil.
Los investigadores reutilizaron un modelo matemático desarrollado originalmente por científicos de la conservación para determinar la fecha de extinción de una especie, que se basa en los avistamientos registrados de cada una.
En este caso, el equipo invirtió el método para determinar la fecha en la que probablemente se originó el coronavirus, según la fecha en que se produjeron algunos de los primeros casos conocidos en 203 países.
Roberts indicó: “Esta novedosa aplicación en el campo de la epidemiología ofrece una nueva oportunidad para comprender la aparición y propagación de enfermedades, ya que solo requiere una pequeña cantidad de datos”.
Frente a esto, Fernando González Candelas, uno de los directores del consorcio SeqCovid-Spain, encargado en España de la secuenciación de miles de genomas del COVID-19, indicó a la agencia “EFE” que el modelo “no incluye datos de genomas o de epidemiología con los que contrastar sus predicciones”.