Primero fue Cristina Kirchner quien escribió una dura carta criticando a la Corte Suprema de Justicia, y ahora es el turno del presidente Alberto Fernández que apuntó contra el máximo tribunal al declarar que actúa con “un nivel de discrecionalidad pasmoso que no puede tolerarse y debe ser corregido”.
“En la Corte, la apertura de recursos tiene un nivel de discrecionalidad pasmosa que no puede tolerarse y debe ser corregido”, disparó Fernández y apuntó que “en los últimos 10 años la Corte Suprema solo uso en dos ocasiones el per saltum: por la ley de democratización de la Justicia y con el traslado de tres jueces”.
Insistió con las críticas al señalar que “la Corte ve gravedad institucional cuando se afecta en algo a la Justicia”.
El mandatario dio una entrevista a “FM La Patriada”, y allí declaró que “hay gravedad institucional cuando trasladan a tres jueces pero la sana discreción le dice que no intervenga cuando condenan a un ex vicepresidente de la República, refiriéndose concretamente a Amado Boudou. Y no hablo de culpabilidad o inocencia. Digo que si había gravedad institucional con tres jueces, tu sana discreción debería decirte lo mismo”.
Para Fernández, “la Justicia es un problema que existe en la Argentina” pero aclaró que “lo que está en el congreso” como proyecto de reforma “es exclusivo de la Justicia Federal” y los problemas “van más allá”.
“El problema judicial es más agudo y empieza en la Corte Suprema”, lanzó Fernández, y contó que al recibir las recomendaciones del consejo consultivo de juristas que convocó queda claro que “todos plantean cambiar las cosas”.
Estas declaraciones llegan poco después de que su vice criticara duramente al máximo tribunal en la que fue su segunda carta abierta del año.
Fue cuando se cumplió un año de gobierno del “Frente de Todos”, pero apuntó a la Corte: “A nadie debería extrañarle, no sólo que el Lawfare siga en su apogeo, sino que además, se proteja y garantice la impunidad a los funcionarios macristas que durante su gobierno no dejaron delito por cometer, saqueando y endeudando al país y persiguiendo, espiando y encarcelando a opositores políticos a su gobierno”, sostuvo Cristina.
Y agregó: “Tampoco deberíamos extrañarnos si esta Corte, que consintió alegremente el mayor endeudamiento del que se tenga memoria a escala planetaria con el FMI, empieza a dictar fallos de neto corte económico para condicionar o extorsionar a este gobierno… O lo que es peor aún: para hacerlo fracasar”.