El Senado deberá definir en las próximas horas a cuántas comisiones girará el proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo aprobado este viernes por la mañana en Diputados, y si repite la fórmula de debate de 2018, cuando la propuesta terminó archivada por una diferencia de siete votos.
Las comisiones que se analizan, informó Télam, son: Asuntos Constitucionales, presidida por la santafesina María de los Angeles Sacnún; la de Justicia y Asuntos Penales, que dirige Oscar Parrilli; la de Salud, que conduce el radical Mario Fiad y no se descarta incluir una cuarta, como Legislación General, que conduce Ana Almirón.
En 2018, cuando el proyecto fue rechazado por el pleno del Senado, las comisiones por las que había pasado fueron las de Salud, la de Justicia y Asuntos Penales, que dirigía el entrerriano Pedro Guastavino; y la de Asuntos Constitucionales, que presidía el catamarqueño Dalmacio Mera.
La exvicepresidenta Gabriela Michetti, por entonces titular del Senado, había incluido entonces a la Comisión de Presupuesto, pero luego aceptó eliminar ese giro.
Tanto Fiad como Mera fueron detractores de la iniciativa, por lo que se baraja ahora la posibilidad de que esta vez se fije como cabecera una comisión conducida por un senador o senadora “verde”, afín a la propuesta enviada por el presidente Alberto Fernández.
Apenas ingrese a la mesa de entrada de proyectos, el expediente tendrá el giro a comisiones y la fecha del llamado al primer plenario para comenzar con la ronda de expositores, que se calcula que no será extensa.
Según Télam, el oficialismo aspira a que el proyecto sea ley antes de fin de año en una eventual sesión el 30 de diciembre. Para eso, el plenario de comisiones deberá emitir dictamen a más tardar el viernes 18 de diciembre. Las fechas se calculan porque, entre la emisión del dictamen y la sanción en el recinto deben pasar al menos siete días hábiles, y hay que considerar los feriados de mitad de semana de las fiestas de fin de año.
Si bien aún hay senadores que no hicieron público su voto, los partidarios “verdes” de la interrupción voluntaria del embarazo confían en que esta vez lograrán imponerse por un ajustado margen a los denominados “celestes” que se oponen a la legalización del aborto, para no repetir la derrota que obligó a archivar la iniciativa hace dos años por 38 votos contra 31.
Con información de Télam.