El Gobierno argentino recibió este martes un apoyo clave para que el país pueda ingresar como miembro pleno a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), uno de los principales objetivos de la gestión de Mauricio Macri en materia de política exterior.
El respaldo fue expresado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés) en el marco del Foro Estratégico Argentina & Estados Unidos realizado en Washington, se informó oficialmente.
El CSIS presentó un informe titulado “Evaluación preliminar de la adhesión de Argentina a la OCDE que destaca las reformas emprendidas desde 2016 por el Gobierno Nacional y apoya al país en su camino a ser miembro de la OCDE.
El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales es un grupo de expertos con sede en Washington, fundado como en la Universidad de Georgetown en 1962.
El centro realiza estudios de políticas y análisis estratégicos de temas políticos, económicos y de seguridad en todo el mundo, con un enfoque específico en temas relacionados con las relaciones internacionales, el comercio, la tecnología, las finanzas, la energía y la geoestrategia.
Durante el encuentro, el secretario de Política Económica, Miguel Braun, expuso sobre los avances y fundamentos del proyecto de acceso de Argentina a OCDE frente a un auditorio integrado por representantes del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo y del sector privado de los Estados Unidos.
Braun estuvo acompañado por el subsecretario y representante del ministerio de Hacienda ante la OCDE, Marcelo Scaglione, y se hicieron presentes diplomáticos de distintas Embajadas de los países miembros de la organización.
Ambos funcionarios integraron una delegación compuesta por los diputados Luciano Laspina, Ezequiel Fernandez Langan, Karina Banfi y Marco Lavagna; el senador Federico Pinedo y representantes del sector privado que manifestaron su compromiso con este proyecto estratégico para el país.
La membresía de la OCDE facilita el diseño y la implementación de políticas públicas, restringe la posibilidad de cambios abruptos en las reglas del juego, reduce el costo del capital, permite la armonización de normas y prácticas con otros países destinado a fomentar los flujos de comercio e inversión.
Asimismo formar parte de ese "club" internacional permite una participación activa en los foros de desarrollo global y refuerza los efectos de reputación que fortalecen la confianza de las empresas y los consumidores. Para Cambiemos la membresía es un objetivo excluyente.
Sin embargo, estos beneficios pueden ser aprovechados aunque parcialmente por los países incluso antes de convertirse en miembros plenos, ya que el proceso de adhesión requiere que los candidatos se comprometan con un plan de acción concreto que sirva para promover una reforma integral de las leyes y regulaciones existentes.
Según el CSIS, en las últimas décadas el marco institucional de la Argentina "ha sido débil e inefectivo y no ha logrado mejorar constantemente el bienestar de la población". Pero, agrega el documento, el presidente Macri identificó el proceso de adhesión a la OCDE como una de las prioridades políticas clave de su gobierno para comenzar a abordar las debilidades institucionales del país y para anclar una amplia gama de reformas estructurales importantes que nunca habían sido emprendidas por gobiernos anteriores.
En junio de 2016, Argentina anunció oficialmente su intención de buscar el respaldo formal de su candidatura para ser miembro de la OCDE y así iniciar oficialmente el proceso de adhesión.
En abril de 2017, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, presentó el Plan de Acción de Argentina y la OCDE a los representantes de los países miembros.
Por la corresponsalía Buenos Aires.