La conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) se opone a llamar a una huelga general contra la política económica del Gobierno, pero los sindicatos de base están elevando la presión para una medida de fuerza contundente y este jueves lo ratificarán en una marcha por el centro porteño.
En los pasillo de Azopardo 826, sede de la central obrera, aseguran que hay consenso mayoritario para una huelga, pero que la conducción lo está frenando porque teme un desbande, según dos fuentes consultadas allí por este medio.
Héctor Daer y Carlos Acuña, los dos secretarios generales, están sintiendo la presión. Y mientras el primero no define su posicionamiento acerca de cuál es el candidato que apoyará este año, el segundo ya está trabajando activamente con Sergio Massa.
Daer y Acuña consideran que llamar a una huelga general de 24 o 48 horas como les exigen las bases sería incrementar más la tensión social sin que luego haya cambios, dado que el presidente Mauricio Macri ratificó el programa económico y ya avisó que, si fuera reelecto en octubre, en su próximo mandato irá "por el mismo camino pero más rápido".
Convocada por la CGT, el moyanismo y las dos CTA, organizaciones sindicales, políticas y sociales este jueves desde las 14 se llevará a cabo una marcha en la Capital Federal. Se sumarán estudiantiles, referentes de los Derechos Humanos y pequeños y medianos empresarios. Toda la multisectorial se expresará contra el programa económico anunciado por el Gobierno.
La marcha será desde Plaza Once, por avenida Rivadavia, hasta 9 de Julio y Avenida de Mayo. Habrá un paso por el Congreso Nacional donde los líderes de la CGT entregarán un petitorio a la oposición.
Pero ya desde las 7:00 de la mañana había manifestaciones en la Ciudad. Los trabajadores despedidos de la multinacional Pilkington, acompañados por militantes de izquierda del partido Nuevo MAS, cortaban la esquina de las avenidas Corrientes y Callao, en el centro porteño.
A estas manifestaciones se sumará una marcha piquetera encabezada por el Polo Obrero que culminará en Plaza de Mayo bajo la consigna “Unidad, producción y trabajo argentino”.
Omar Plaini, secretario general del gremio de Canillitas, dijo este jueves que "la CGT desoyó el reclamo de un plan de lucha" y señaló que los tres paros y alguna movilización que se hicieron han sido insuficientes por la situación que está viviendo Argentina".
Por ello, Plaini se sumó a la creciente cantidad de dirigentes sindicales que le piden a Daer y Acuña que convoquen a las fuerzas sindicales para una reunión que ponga fecha a una huelga general.
"Este gobierno está dejando el país en una situación angustiante para varios sectores de la sociedad; todos los índices indican hoy la necesidad extrema de muchas familias que tienen que recurrir a comedores", se quejo Plaini.
El avance de la crisis económica por la recesión -con 264.000 despidos en 2018- y el aumento del 50% en el costo de vida en el último año vienen generando un caldo de cultivo para las protestas sindicales.
Carlos Ortega, líder del gremio de los empleados de ANSeS, afirmó esta mañana que los trabajadores marcharán "en contra de la reforma laboral, la previsional y fundamentalmente, en contra de este modelo exclusivo y excluyente".
En ese sentido, el sindicalista sostuvo que al margen de la marcha, la CGT debe convocar "a ponerle fecha a un paro general".
