Mía Pedernera tenía 3 años y vivía en una habitación junto a sus 11 hermanos en una humilde vivienda ubicada en Yapeyú al 700, en la localidad de Glew.
La policía encontró el cuerpo de Mía tirado en el piso, con signos de desnutrición y con quemaduras en los pies. Según el primer informe médico, la nena estaba deshidratada, con desnutrición crónica y había sido golpeada. Según publicó La Tercera, falleció por asfixia.
Su papá, un sujeto de 42 años y una de sus tías, que era su pareja, que eran los encargados de cuidar a la nena quedaron detenidos y están acusados de homicidio calificado por el vínculo.