En Boca hay mucho fastidio por la presión de la Conmebol para disputar a toda costa la Superfinal de la Copa Libertadores, pese a la agresión de los hinchas de River contra el plantel y las cosecuencias que dejó ese ataque.
Además, desde la vereda xeneize también señalan la diferencia respecto al 2015, cuando le dieron por ganada la serie de octavos de final de la misma competencia a River, luego del famoso episodio del gas pimienta contra el plantel millonario.
En medio de tantas sospechas, apareció una foto que terminó de hacer estallar de bronca al público xeneize: Astrid Domínguez, hermana del presidente de la Conmebol, posó en el Monumental con una camiseta del Millonario.
Lógicamente, la reacción de los fanáticos de Boca no se hizo esperar. El perfil de Astrid era privado, y curiosamente, minutos después de que estalló el escándalo, la cuenta directamente desapareció de Instagram.