Oscar Thomas, el último prófugo por la causa de los Cuadernos K, fue detenido este martes por efectivos de la Policía Federal, en su departamento del barrio porteño de Recoleta. El empresario misionero está acusado de formar parte de una asociación ilícita liderada por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La captura corrió a cargo de miembros del Comando Unificado de Recaptura de Evadidos (CUFRE), bajo la órbita de la Secretaría de Seguridad de la Nación, que llegaron hasta el edificio ubicado en Uriburu 1044, en la Ciudad de Buenos Aires, luego de un llamado al 134.
El ex director de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) era buscado por las autoridades desde hacía varias semanas, ya que su nombre aparecía vinculado al pago de coimas en los textos redactados por Oscar Centeno, el ex chofer de Roberto Baratta (mano derecha del ex ministro de Planificación, Julio de Vido).
El Ministerio de Seguridad había ofrecido el mes pasado una recompensa de 500 mil pesos para dar con el paradero de Thomas, quien nunca se presentó ante el juez Claudio Bonadio. En su momento, su abogado defensor había asegurado que no se entregaría, e incluso se especuló con que se había fugado al exterior.
Tras varios allanamientos, quien llegara a ser un nexo clave entre el ex gobernador de Misiones Carlos Rovira y los gobiernos kirchneristas, se transformó hoy en el último detenido por la causa de corrupción en la obra pública.