Con vientos fuertes y lluvias, el huracán Florence azota la costa este de Estados Unidos

Con casi dos millones de evacuados en cinco estados, crece el temor de que muchas localidades queden inundadas.  

Con vientos fuertes y lluvias, el huracán Florence azota la costa este de Estados Unidos
TOPSHOT - Rain begins to fall as the outer bands of Hurricane Florence make landfall in Myrtle Beach, South Carolina on September 13, 2018\u002E - Hurricane Florence edged closer to the east coast of the Hurricane Florence edged closer to the east coast of the US Thursday, with tropical-force winds and rain already lashing barrier islands just off the North Carolina mainland\u002E The huge storm weakened to a Category 2 hurricane overnight, but forecasters warned that it still packed a dangerous punch, 110 mile-an-hour (175 kph) winds and torrential rains\u002E (Photo by Alex Edelman / AFP)

La costa este de Estados Unidos está siendo azotada por fuertes ráfagas de viento y lluvias del huracán Florence que amenaza con provocar inundaciones catastróficas y serios daños.

Pese a que bajó a categoría 1, el huracán genera vientos de 150 km/h y es muy peligroso, advirtió el Centro Nacional de Huracanes (NHC) en un boletín.

El ciclón tocó tierra a las 07.15 hora local (11.15 GMT) en Wrightsville Beach, en Carolina del Norte, informó NHC, que advirtió sobre "inundaciones con lluvias catastróficas sobre sectores de las Carolinas".

"Esto no es el final", dijo Jeff Byard, responsable de la Agencia federal para el manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés)."Una amenaza importante persistirá durante las próximas 24 a 36 horas" en particular por el riesgo de fuertes lluvias, marejadas e inundaciones, agregó.

Las órdenes de evacuación alcanzaron a unas 1,7 millones de personas en Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia que emprendieron camino el miércoles para refugiarse de la tormenta.

Cinco estados declararon estado de emergencia: Carolina del Norte, Carolina del Sur, Georgia, Maryland y Virgina, además de la capital Washington.

"La tormenta está causando estragos en nuestro estado", dijo el goberanador de Carolina del Norte, Roy Cooper, al señalar que medio millón de personas se encontraba sin electricidad y un río tenía oleaje de hasta tres metros.

"No registrábamos niveles de lluvias de esta dimensión desde 1958. Es una situación de peligro extrema y seguirá siéndolo por días. Les pido que no salgan durante la tormenta", agregó Cooper al advertir de que todo empeorará.

"Nos enfrentamos a múltiples amenazas. Estamos profundamente preocupados por comunidades enteras que podrían ser barridas", agregó. Además, afirmó que "las inundaciones pueden ser mortales incluso cuando la tormenta pase" porque "los ríos seguirán creciendo".

Una de las poblaciones más afectada es New Bern, en Carolina del Norte, donde sus autoridades, apoyadas por efectivos de la Guardia Nacional, han respondido a decenas de llamadas de emergencia para rescatar a un centenar de personas.

"Si alguien pudiera ayudar... nuestros automóviles están bajo el agua y nuestra casa está inundada hasta el ático", pidió una usuaria de Twitter llamada Brianna oriunda de esta ciudad situada junto al río Neuse, que sufrió los efectos de la marejada ciclónica.

El canal CNN informó, citando a autoridades locales, de que más de 60 personas debieron ser desalojadas de un hotel de Jacksonville, también en Carolina del Norte, después de que parte del tejado se derrumbase.

Además, la llegada del huracán obligó a cancelar más de 1.300 vuelos. Las aerolíneas han extendido exenciones y avisos para viajeros con itinerarios que involucran aeropuertos en el camino de la tormenta.

Las empresas American Airlines, Delta Air Lines, Southwest Airlines, United Airlines, Alaska Airlines, JetBlue Airways, Spirit Airlines han publicado información para los viajeros en sus páginas web sobre los cambios en los itinerarios afectados esta semana, que no tendrán un costo adicional.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, destacó y agradeció hoy a través de Twitter el "increíble" trabajo de las autoridades y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés).