Unos 500 hombres de negocios asistieron este martes a la Conferencia Anual de la Unión Industrial Argentina (UIA) en Buenos Aires, entre la incertidumbre por cuál será el "techo" para el precio del dólar, el "dolor" por la vuelta de las retenciones a la economía y las dudas sobre si se respetarán los plazos previstos para los nuevos impuestos.
Liderados por el jefe de la UIA, Miguel Acevedo, los industriales recibirán esta tarde al presidente Mauricio Macri, a pocas horas del anuncio sobre los nuevos derechos de exportación para todos los sectores. Ayer iban a reunirse con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, pero el funcionario suspendió imprevistamente el encuentro.
"Las medidas van a ser un impacto fuerte para la producción. Algunos impuestos empiezan como provisorios y terminan como definitivos. Esperemos que no sea así", dijo Acevedo al abrir la jornada en las instalaciones del Parque Norte, en la Capital Federal.
Antes de Macri pasó por el evento el ministro de Producción, Dante Sica. "Tenemos que hacer un esfuerzo entre todos", dijo y expresó que el Gobierno no quería el retorno de las retenciones, pero no hubo alternativa por al "crisis macroeconómica fuerte".
Sica intentó llevar tranquilidad a los empresarios en medio de la “tormenta”. Dijo que en la gestión Cambiemos están “muy confiados” en que con las medidas económicas anunciadas el lunes se podría aspirar a que la economía “deje de caer” hacia fin de año.
“Confiamos en que con las medidas y esta nueva revisión del acuerdo con el FMI podamos ver para final del año una baja de las tasas y una economía que deje de caer”, afirmó el funcionario.
Los empresarios lo miraron con cierto escepticismo. Es que el pasado 30 de agosto el Banco Central aumentó la tasa de política monetaria al 60% y prometió no volver a tocarla al menos hasta diciembre.
A los industriales y dirigentes del agro se les notaba el impacto de las decisiones oficiales por las que el Estado tendrá una recaudación adicional de 68.000 millones de pesos en lo que resta de 2018 y de 280.000 millones de pesos en 2019.
En ese escenario, uno de los empresarios más directos con el reclamo al Gobierno fue Cristiano Rattazzi, CEO de Fiat Chrysler Automobiles Argentina. Dijo se debe "liberar al dólar" para ver "dónde se estabiliza" el tipo de cambio en la Argentina.
"Yo se lo vengo diciendo a los funcionarios con los que hablo: liberen el tipo de cambio y dejen a ver dónde se estabiliza", expresó. Y agregó: "Aquí lo fundamental llegar lo más rápido posible al superávit fiscal. Acepto las retenciones porque sé que era algo necesario, aunque a la industria automotriz le duele muchísimo".
Daniel Pellegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina, también se hizo presente. Dijo que el campo espera que el nuevo esquema de retenciones tenga un plazo de solo dos años como prometió el Gobierno y advirtió que estos impuestos "distraen la capacidad de generar nuevos empleos".
"Se va a un esquema de derechos de exportación que distrae la capacidad de generar nuevos empleos y desarrollo en la Argentina, en un contexto que entendemos con la macroeconomía convulsionada", sostuvo.
Consideró también que los productores deben "mantener la tranquilidad" dado que si el país no les ofrece un contexto macroeconómico equilibrado, tampoco estarán las condiciones para producir.
El empresario agropecuario dijo que el campo va a aportar "alrededor de un tercio" del "esfuerzo" que el Gobierno de Mauricio Macri le pide a los sectores productivos aplicándoles derechos de exportación.
"Y bueno... lo vivimos con dolor, ¿no? El agro viene con dos cosechas récord y ha revertido la curva de caida del stock bovino nacional, con un 60% más de exportaciones de carne", dijo el presidente de la Sociedad Rural.
Pellegrina agregó que si bien "siempre está el recelo" de pensar que los impuestos que llegan no se van más, ahora el campo entiende que hay un "compromiso" del Gobierno para que las nuevas retenciones tengan un plazo máximo de dos años.