Con el fin de achicar el déficit fiscal para 2019, evalúan mejor los ingresos en lugar de recortar gastos. Por tal motivo, desde el Gobierno analizan aplicar retenciones a a las exportaciones. Es que intentarán enviar una señal al mercado con respecto a los recursos para pagar la deuda y de esa manera alejar los fantasmas del default.
La idea es gravar no sólo las exportaciones del campo, según fuentes oficiales. Podrían incluir sectores como la industria, la energía, minería, entre otros.
Por su parte, Nicolás Dujovne, el ministro de Hacienda, había anticipado que el Gobierno buscará adelantar el cumplimiento de la meta fiscal con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Ahora, el oficialismo busca el apoyo de la oposición para el Presupuesto 2019, cuya propuesta será presentada el 15 de septiembre y se basa en un 1,3% del PBI. Además, el FMI compartirá el plan para la Argentina, que se basa en flexibilizar las fechas de desembolsos y darle mayor libertad al Banco Central para que tenga más cintura al momento de intervenir ante situaciones como la de esta semana cuando el dólar pasó los $40.
Por último según publica Clarín, las cerealeras apuraron el registro de exportaciones, debido a los rumores de las retenciones y luego de que dos semanas atrás el Gobierno avanzara sobre las retenciones a la soja.