Los bastones presidenciales de Cristina y Néstor Kirchner volverán a la residencia de El Calafate, según consignó Clarín.
El mismo medio había revelado que los mismos se encontraban entre los cien objetos que se secuestraron en el allanamiento realizado el fin de semana por orden del juez Claudio Bonadio, el magistrado pidió que sean devueltos al considerar que se tratan de "objetos personales".
Fue la propia Cristina Kirchner la que se quejó a través de las redes sociales de que le hayan quitado los bastones y las bandas que recibieron cuando asumieron las respectivas presidencias.
"Me acabo de enterar que entre los objetos que mandó a secuestrar Bonadio de mi casa de El Calafate estaban las bandas y bastones presidenciales de Néstor y míos. La violación de los derechos y garantías sin límite", tuiteó.
Desde la Oficina Anticorrupción (OA), en tanto, señalaron a Clarín: "Los bastones deberían estar en custodia en algún museo nacional, son patrimonio histórico no son objetos personales". En este sentido, explicaron que hay objetos que "pertenecen al Estado y se reclamará que vuelvan a donde corresponde".
Los bastones secuestrados fueron, según el detalle del allanamiento: "bastón de mando de la Señora Presidente de la Nación en madera y metal blanco en estuche de madera; y el bastón de mando presidencial en madera, con empuñadura de metal color amarillo y Escudo Nacional Argentino, con dragona en hilos de metal de color amarillo, en estuche de color, marca Ricciardi".
El resto se los objetos secuestrados serán analizados por la Justicia y recién allí se decidirá si se convoca, por ejemplo, al Tribunal de Tasación de la Nación (TTN) para asignarle un valor oficial a todos los bienes. El primer cálculo sobre los cien objetos ronda los 10 millones de dólares.