Si bien la cantidad de vasectomías realizadas en Argentina sigue estando muy por debajo de las ligaduras de trompas -97 de las primeras y 12.976 de las segundas en 2016- desde entonces el número de intervenciones ha comenzado a crecer y son más los hombres que se someten a este método anticonceptivo.
Silvia Oizerovich, responsable del Programa de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud de la Nación, señala este leve incremento, incluso en las consultas telefónicas que reciben al 0800-222-3444.
"Por primera vez en los ocho años que tiene la línea, se llegó al 12% respecto de las consultas sobre ligaduras de trompas. En 2016 no llegaba al 5%. Si bien falta mucho por cambiar e históricamente la responsabilidad de la anticoncepción recae sobre las mujeres, esto es un dato interesante para ver la posición activa de los varones", dice a La Nación.
A pesar de los mitos que circulan a su alrededor, los profesionales aseguran que la vasectomía consiste en una cirugía muy simple en la que -sin bisturí- se ligan o cortan los conductos por donde circulan los espermatozoides. No requiere de internación y se realiza con anestesia local.