Una de las últimas imágenes de Javier Mascherano en la selección es la del partido ante Nigeria, donde se lo pudo ver con un corte en la ceja y la sangre cayendo por el rostro. Pese a esto, el mediocampista siguió jugando y hasta protestándole cara a cara al árbitro turco Cuneyt Cakir.
El mundo entero habló de esta situación y un hincha fue mucho más allá: se tatuó en un gemelo el rostro "guerrero" del 14 de la Selección argentina. El mismo comenzó a viralizarse rápidamente en las redes sociales.
Sin embargo, no es la primera vez que el futbolista llama la atención más allá del juego. El Mundial pasado, en la semifinal, ante los penales con Holanda, le había dicho a Sergio Romero: "Hoy te convertís en héroe".