Tras la cumbre en el Palacio de Hacienda, en la que participaron Nicolás Dujovne, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y el de Modernización, Andrés Ibarra, el Gobierno decidió buscar cerrar con un 12% de aumento la paritaria de los empleados estatales, sin cláusula gatillo ni revisión.
La Casa Rosada ya evaluaba la posibilidad de estirar su propuesta desde antes de recurrir al Fondo Monetario Internacional. Incluso, con la inflación acumulada de 9,6% al mes de abril, se especulaba que el piso podía llegar a ser en torno al 15%, pero esto se descartó tras el pedido de Mauricio Macri de controlar los gastos del Gobierno.
De esta forma, la oferta será de 12% de aumento y sin cláusula gatillo. A esto se sumaría el premio por presentismo que se implementó con la paritaria pasada.
Este punto, sin embargo, genera dudas entre los gremios, debido a la falta de certezas respecto a cómo se va a implementar, según informa Clarín. Sin embargo, el Gobierno sostiene que es posible establecer qué áreas cumplieron con los objetivos de trabajo, y la próxima semana convocaría a los gremios UPCN y ATE.
Por su parte, Ibarra insistirá con la evaluación de la plantilla de empleados. Actualmente, bajo su órbita hay 208 mil empleados, de los cuales cerca de 70 mil aún son contratados. Cabe recordar que desde que asumió la actual gestión pasó a planta permanente a cerca de 3.000 trabajadores que en su mayoría se desempeñaban hacía diez años.
Por lo pronto, desde el mes pasado ya está abierto el plan de retiros voluntarios, oficializado a través de un decreto de Mauricio Macri, mediante el cual el Gobierno ofreció entre 24 y 36 sumas no remunerativas mensuales a trabajadores con más de diez años en el Estado.
