El nigeriano Chinanu Onuaku, de apenas 20 años, llegó a Houston Rockets a último momento por la lesión de Clint Capela y ya da que hablar.
Con sus tiros poco ortodoxos a la hora de lanzar libres desde los cuatro metros, o un lanzamiento más conocido en Estados Unidos como "granny shot" (tiro de abuela), Onuaku dejó boquiabiertos hasta a sus propios compañeros.
La presión del debut no le pesó y Onuaku convirtió los dos tiros libres en la victoria de su equipo 131 a 115 ante Phoenix Suns.