Marcelo Tinelli es vicepresidente de San Lorenzo "en retirada", pero en cambio el básquetbol del club es todo suyo, y por eso anoche lloró cuando se concretó el título de la Liga de las Américas que emocionalmente comparó "con la Libertadores del fútbol".
Se lo vio muy emocionado a Tinelli y cuando habló del padre se puso a llorar, se le cortó la voz, y fue entonces que lo rescató de la charla con Télam el base Nicolás "Penka" Aguirre y se lo llevó a dar la vuelta olímpica.
"Ganamos la copa más soñada, esto queríamos todos y se nos pudo dar ante nuestra gente. San Lorenzo se merece un título de este nivel. Cuando lo traía a mi hijo le dije que íbamos a sufrir pero que salíamos campeones. Me acordé mucho de mi papá en todo momento, porque gracias a él conocí el básquetbol y a este club", expresó un conmovido Tinelli.
"Toda la gente maravillosa de San Lorenzo llenó el estadio y no le podíamos fallar. Todavía es temprano para pensar en ser la sede de la Intercontinental, porque primero quiero disfrutar. Este es un paso más en el proyecto. Llegamos al básquetbol con la idea de hacer historia y lo vamos logrando", enfatizó con orgullo.
Tinelli remarcó que lo vivido anoche en el gimnasio Roberto Pando se lo va a "guardar para siempre en un rincón del corazón. Me tomé 10 botellas de agua en forma de cábala y porque los nervios que pasamos por momentos fueron tremendos".
"Para mi ganamos la Libertadores del básquetbol. Viví el mismo clima que en 2014 cuando la ganamos al fútbol: no pude casi gritar", expresó, y otra vez los sollozos interrumpieron la charla, esta vez definitivamente.
San Lorenzo albergó el Final Four y se llevó la Liga de las Américas tras superar a Mogi das Cruzes, de Brasil, por 79 a 71. ¡Y deliró todo Boedo!