La ministras de Seguridad, Sabina Frederic, autorizó el uso de las pistolas Taser para el Grupo GEOF de la Policía Federal, que podrá utilizarlas luego de un protocolo de adiestramiento y aplicación, en el marco de una prueba piloto.
Se trata de 90 armas no letales que fueron adquiridas por Patricia Bullrich en 2019 y que, tras la asunción de Alberto Fernández en diciembre del año pasado, la actual titular de la cartera de Seguridad prohibió.
Es que el crimen del policía Juan Pablo Roldán en el barrio porteño de Palermo volvió a poner en agenda la utilización de este tipo de armas. De hecho, incluso desde el oficialismo, salieron a decir que se podrían haberse evitado dos muertes (la del policía y su agresor) con la intervención de las Taser.
En ese sentido, Sergio Berni, ministro de Seguridad del gobierno bonaerense, y Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados, pidieron la incorporación de estas pistolas a las fuerzas.
"No podemos estar discutiendo en el año 2020 si 'Taser sí o Taser no' por cuestiones ideológicas. Los que discuten estas cosas son gente que no está en la calle y que no le pasan estas cosas. Hay situaciones donde la ideología no se puede entrometer. El Estado tiene que rever muchas posturas y protocolos", opinó Berni.
A partir de la decisión de Frederic, las Taser serían incorporadas por el resto de los grupos de elite de las distintas fuerzas, como el Grupo Alacrán de la Gendarmería, el Grupo Albatros de la Prefectura y un sector especializado de la Policía de Seguridad Aeroportuaria.
Por su parte, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, anunció este miércoles la compra de 300 Taser para ser usadas por la Policía de la Ciudad.
“Preferimos que la Policía utilice estos dispositivos antes que un arma de fuego. Es una herramienta que ayuda a reducir a un delincuente en una situación complicada, sin tener que usar un arma letal”, manifestó.
