Los dos grupos de bonistas más duros cruzaron con dureza este martes al ministro de Economía, Martín Guzmán, al responsabilizarlo por el estancamiento en las negociaciones y advirtieron una vez más con que no descartan judicializar.
Tras ello, los bonos pasaron a operar en terreno negativo y el riesgo país acentuó su alza, al 1,2%, llegando a los 2.516 puntos básicos.
Una fuerte tensión se disparó así en medio de las negociaciones, después de que Guzmán afirmara la semana pasada que había habido avances en la dirección de “sostenibilidad” que pretende el gobierno de Alberto Fernández.
El fin de semana hubo negociaciones dado que el ministro acercó una nueva propuesta. Y tras ello, se conoció este lunes que los fondos de inversión Gramercy, Fintech, Greylock y Oaktree decidieron apoyar la iniciativa, por lo que estarían dispuestos a cerrar la operación.
Pero en la vereda opuesta aún están parados el Grupo Ad Hoc de Tenedores de Bonos Argentinos (liderado por BlackRock) y el Grupo de Tenedores de Bonos del Canje (EBG, por sus siglas en inglés).
Estos dos últimos dicen tener en su poder bonos soberanos de la Argentina por 21.000 millones de dólares, un tercio de los 66.238 millones en papeles que forman parte de la negociación para el canje.
El Ad Hoc y el EBG dijeron en un muy duro comunicado que desean aclarar que no se ha emprendido ninguna "interacción sustantiva" entre ellos y las autoridades de la Argentina desde el 17 de junio pasado.
Esto, admitieron los dos grupos de bonistas, va en contrario a las publicaciones que se hicieron a partir de las declaraciones de Guzmán, quien la semana pasada habló de avances en un evento internacional organizado por la agencia Bloomberg.
Fuentes de estrecha colaboración con el ministro le dijeron este martes a Vía País, tras conocerse los comunicados, que "hay diálogo con todos aquellos que tienen una posición constructiva real y que son cada vez más".
En el Gobierno desdramatizaron la presión de los dos principales grupos de bonistas. "Los acreedores con los que se está avanzan han crecido mucho en su capacidad de representación", explicaron las fuentes oficiales consultadas.
Pero en concreto, las diferencias económicas y legales siguen impidiendo al menos por ahora cerrar la operación cuando el plazo vigente vence el 24 de julio. Si esto continuara así, el Gobierno podría optar por hacer un canje parcial e intentar una nueva negociación con el resto de los bonistas en el segundo semestre. Aunque esto no está siendo evaluado ahora.
El grupo Ad Hoc está liderado por fondos de peso en las finanzas internacionales como BlackRock (el más grande del mundo), Fidelity, Ashmore y Rowe Price. De lo que el país busca canjear, estos tienen el 25% de los papeles colocados por el macrismo y el 15% de los de los canjes de 2005 y 2010, realizados por el kirchnerismo.
En tanto, en el grupo EGB están fondos como HBK Investments, Monarch Alternative Capital LP, Oaktree Capital Management, L.P., Pharo Management (UK) LLP, Redwood Capital Management, LLC y VR Capital Group.
Según el comunicado de estos dos grupos, existe una "falta de una interacción seria" por parte de las autoridades de Argentina, lo cual resulta "sumamente preocupante" dado que "el tiempo es un factor esencial".
Asimismo, dicen que como ellos el ministro Guzmán debería “centrarse en evitar los elevados costos legales y económicos que conllevaría prolongar el incumplimiento de pagos en el que se encuentra el gobierno argentino”.
El Gobierno no pagó el lunes un vencimiento de 98 millones de dólares de los Bono Argentina 2117 (AC17) y este martes tampoco afrontó un compromiso de 566 millones de dólares por tres series de los Discount 2033 emitidos bajo leyes extranjeras. Esto se suma al default del 22 de mayo pasado cuando no se pagó los 503 millones de dólares de los bonos globales.
Los acreedores Ad Hoc y EBG dijeron que siguen “dispuestos a participar de forma constructiva con el gobierno argentino para alcanzar acuerdo mutuo que cuente con el apoyo unánime de los tenedores de bonos”.