María Florencia Santa Cruz tenía 30 años y su cuerpo semidesnudo fue encontrado en Tigre por un patrullero, colgado de un mural blanco, con una campera atada al cuello. Gracias a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, efectivos policiales detuvieron a un hombre identificado como Santiago Hernández. Es el décimotercer femicidio perpetrado durante el aislamiento obligatorio por coronavirus.
El cadáver de la víctima fue hallado durante la madrugada del martes en las calles Benito Lynch y Acceso Tigre, en la zona norte del conurbano bonaerense.
Los investigadores analizaron ocho cámaras del Centro de Operaciones Tigre (COT), y vieron que Santa Cruz llegó al lugar acompañada de un hombre. Si bien la grabación no captó el momento de la muerte, el sospechoso se retiró del lugar caminando y se fue a su casa, a poco más de 10 cuadras. En el trayecto, la policía encontró un par de anteojos, un pañuelo y la cartera de la víctima.
Efectivos realizaron un allanamiento en la vivienda ubicada en la esquina de José Manuel Estrada y Gral. Campos, en el que detuvieron a Santiago Ezequiel Hernández (32), según informó Télam. Además, el personal policial secuestró las prendas de vestir que utilizó en el momento del hecho.
Familiares de la víctima, hija de un comisario inspector retirado, contaron que tenía problemas psiquiátricos y de adicciones, y dejaron en claro que el sospechoso no era pareja de Florencia, ni lo había sido.
"Hoy a mi familia es a la que le toca esto, a mi tía Florencia, pero lo peor de todo, más lamentable, es que esto va a seguir pasando", escribió su sobrino Lucas en las redes sociales. "Nadie hace nada y no me refiero a vos o a mí sino a la gente que puede hacer algo para que esto cambie, pero no hacen nada, las siguen asesinando", agregó.
Los fiscales Sebastián Fitipaldi, Diego Callegari y Mariela Miozzo investigan el hecho como femicidio y esperan el resultado de la autopsia para imputar a Santiago Ezequiel Hernández.