El presidente saliente de Bolivia, Evo Morales, criticó a la Organización de los Estados Americanos (OEA) y consideró que "no está a favor de los pueblos latinoamericano" sino al "servicio del imperio norteamericano".
"La OEA no está al servicio de los pueblos latinoamericanos ni de los movimientos sociales sino al servicio del imperio norteamericano; habría que cambiarle el nombre, debería ser organización de estados del norte", manifestó Morales en una conferencia de prensa desde México.
Por su parte, pidió investigar el accidente que tuvo el 4 de noviembre pasado a bordo de un helicóptero en el sur de La Paz y consideró que no fue un hecho "casual". Asimismo, señaló al opositor Luis Camacho como responsable.
A su vez, se refirió a las Fuerzas Armadas del país y cuestionó a la policía. "¿Cómo pueden hacer quemar el edificio del tribunal departamental donde están las actas de sufragio?".
Y agregó en referencia a su gestión en materia de seguridad: "Cuando yo entré al gobierno las Fuerzas Armadas tenían un solo helicóptero y ahora los hemos equipado con 25, antes no había eso. Nunca pensé que este equipamiento iba a ser contra el pueblo boliviano. No se manchen con la sangre del pueblo".
Sobre el proceso electoral del 20 de octubre, Morales manifestó que "nunca" pidió a instituciones o autoridades "que hagan alguna cosa ilegal".
Además, el líder indígena explicó que convocaron al "diálogo" y aceptaron "desconocer el resultado" electoral que -según Morales- lo dio ganador en primera vuelta para ir a unas nuevas elecciones, pero afirmó que desde la oposición "no aceptaron".
Por último, se refirió a la proclamación de la senadora opositora Jeanine Añez como presidenta de Bolivia y dijo que con los sucedido en el Parlamento este martes "se confirma totalmente el golpe de Estado". Y opinó: "No respetó la constitución: cualquier renuncia tiene que ser aprobada o rechazada y no hubo una sesión tal".