Muchas veces las historias de amor comienzan en el lugar que uno menos piensa, así como la de Santiago y Nazaret, quienes se conocieron a través de una ventana del Hospital Pedro Moguillansky de Cipolletti cuando él estaba internado por un accidente de tránsito y ella cuidaba de su papá.
La historia es de películas: Santiago Pereira, de 24 años oriundo de Cipolletti sufrió un accidente de tránsito que casi termina con su vida, y Nazaret Cona, de 37 años oriunda de Fernández Oro, tuvo que cuidar a su padre de 86 años por una neumonía bilateral provocada por el Covid-19.
Por diferentes razones, ambos terminaron en el mismo centro de salud, él en la habitación N°13 y ella en la N°15. Siempre cruzaban miradas por la ventana, pero nunca se hablaron personalmente hasta que una publicación en redes sociales los empujó a entablar una conversación.
Aunque nunca lograron vincularse en el hospital, ellos sabían que no se trataba simplemente de atracción física, sino que había sentimientos sin saber ni siquiera sus nombres ni nada de sus vidas.
El accidente que hizo que conociera al amor de su vida
El 27 de junio de 2022, Pereira llegó al hospital tras sufrir un accidente con su moto, en las calles Mariano Moreno y Candelaria. Por mala suerte, el joven no tuvo tiempo de reaccionar ante una mala maniobra de un vehículo.
Cuando Santiago ingresó el centro de salud, estaba casi al borde de la muerte y en la guardia todos los médicos tuvieron que atenderlo. El lado derecho de su cuerpo estaba muy lastimado, sobre todo su pierna, la cual casi amputaron.
Afortunadamente, el joven de Cipolletti comenzó a mejorar su estado de salud y los profesionales no tuvieron que tomar una medida extrema. Así fue que estuvo internado durante cuatro meses en el hospital.
Día a día, Pereira se hacía amigo de todos en el centro médico, pero nunca creyó que en ese lugar iba a encontrar un gran amor: el 27 de septiembre vio a Nazaret, quien ingresó a cuidar a su padre, pero siempre debía estar aislada por protocolo del Covid.
Desde que la mujer apareció, el cipoleño preguntó por su nombre a las enfermeras, pero prefirieron no darle ningún dato. Entonces, con una ventana de por medio, comenzó esta increíble historia: cuando él la miraba, ella se daba vuelta y viceversa.
Los jóvenes nunca pudieron hablar porque ella debía cumplir con el protocolo sanitario, pero desde el primer día sintieron una conexión muy especial cada vez que cruzaban miradas.
Finalmente, el 17 de octubre al papá de Nazaret le dieron el alta médica y el 22 del mismo mes Santiago también regresó a su casa. Ellos pensaron que no iban a volver a encontrarse, pero el destino los volvió a juntar mediante una publicación de Facebook.
Las redes sociales como cupido en la historia de amor entre Nazaret y Santiago
La mujer de Fernández Oro le pidió al periodista Miguel Ángel Parra que compartiera en su perfil el agradecimiento para el personal de salud por la buena atención a su padre, quien pudo recuperarse del Covid-19. Junto al comunicado, estaba una foto de Nazaret con su papá.
Santiago vio la imagen de ella y no dudó en dejar un comentario. Así, empezaron a seguirse en las redes y a hablar. Él fue el que dio el primer paso y, muy seguro de sus sentimientos, le preguntó si quería ser su novia. Ella no dudó y le respondió que sí.
En diálogo con LM Cipolletti, Nazaret contó que en un primer momento dijeron que iban a empezar a conocerse y en noviembre ya estaban comprometidos. “Fue como si nos conociéramos de toda la vida, realmente amor a primera vista”, expresó. Y agregó: “Cuando empezamos a estar juntos me enamoré aún más. Su tranquilidad, su sonrisa, sus ojitos. Es hermoso”.
Por su parte, Santiago manifestó que “fue un flechazo. Todo pasó muy raro, pero muy lindo al mismo tiempo. Algo bueno me tenía que pasar después del accidente”. Ahora, no hay nada ni nadie que los separe y ella lo acompaña en su rehabilitación.
Santiago espera volver a caminar en tres años y una vez que termine el proceso de recuperación, comenzará a planear su casamiento con Nazaret. Por ahora, viven juntos con el hijo de ella, quien ya le tomó mucho cariño al cipoleño.
“El lunes pasado mi hijo tuvo un problema de salud y Santi estrenó su título de papá. Fue muy dulce verlos a los dos, me enamoré más”, concluyó Nazaret.