El trágico suceso que nueve años atrás conmocionó a todo Santiago del Estero tomó un giro judicial. La mujer que había asfixiado y tirado a su bebé a una zanja fue condenada a prisión perpetua; pero en el 2016, tras la apelación de la defensa, por homicidio calificado por el vínculo, se redujo a 8 años y este 2022 sería liberada.
El hecho por el cual fue detenida ocurrió en el año 2013: Micaela Roxana Díaz, quien entonces tenía 18 años, asfixió con una bolsa de nylon a su hijo Alejo de tres meses y lo arrojó a una zanja. El cuerpo del bebé fue encontrado en el interior de una acequia, cerca de la localidad de Bandera, donde residía su madre.
En ese momento la joven acusó del crimen a un grupo de hombres que circulaban en un automóvil rojo. Sin embargo, tras los avances de la investigación y la contundencia de las pruebas, la mujer terminó confesando e crimen: “Lo maté porque no tenía plata” y luego intento quitarse la vida.
La joven estuvo internada en el Hospital de Añatuya en Santiago del Estero y durante el juicio aseguró que estaba “arrepentida” y dijo que el Tribual disponga “lo que considere”, publicaron en El Cordillerano.
“Sé que Dios me ha perdonado. Lo único que quiero decir es que no hablen cosas que no son. Yo estoy arrepentida de corazón, por algo dije la verdad, si no hubiera seguido diciendo cosas que no son, por algo me estoy haciendo cargo”, había declarado.
Tras los dichos, las pruebas e investigaciones, la justicia de Santiago del Estero la condenó a prisión perpetua por haber asesinado a su hijo. Sin embargo, nueve años después y tras una serie de apelaciones y reducciones de pena, la mujer que hoy tiene 26 años, quedará en libertad.