Siguen los femicidios en Argentina, este hecho fue en La Pampa, Mirta Fetter (39), madre de tres hijos, y viuda, murió el martes 11 de enero, y por esta causa está detenido Marcelo Darío Agüera, quien en ese momento era su pareja. El acusado empezó una huelga de hambre en la cárcel porque, según él, es inocente: “Empecé una huelga de hambre para que me devuelvan la libertad, porque soy cien por ciento inocente y hace seis meses que estoy detenido”.
Este caso se remonta al 7 de enero, cuando Agüera llamó al 101 para pedir asistencia para la víctima, Mirta Fetter, que supuestamente se había golpeado luego de una caída en su domicilio. Fue trasladada a Santa Rosa para ser atendida por el equipo del Hospital Molas.
Por su parte, Miguel Fetter, hermano de Mirta, aseguró a la prensa que ella fue golpeada: “Se lo dijo a mi mamá (Inés). Le contó a mi mamá que la había golpeado, que le pegó una piña y la revolcó por el suelo”. Agregó que Mirta había salido a tomar algo, y cuando vuelve a su casa, le dice a su expareja que se va, “pero él le pide que se quede, ahí dice que él le pegó una trompada, la tiró al piso y la revolcó”.
A su vez, el detenido en diálogo con La Arena dijo: “Mi compañera sufrió un accidente, pero me acusaron de femicidio. Es mentira, nunca maté a nadie. Estoy viviendo un infierno porque no hay ninguna prueba, pero sigo privado de libertad injustamente. Soy albañil, tengo 39 años, no registro ningún antecedente de violencia y nunca había estado detenido”.
Según las palabras del hermano de la víctima, Mirta lo conocía “hace tres o cuatro días”. Agregó que él se enteró al otro día de la golpiza, y relató que ella estuvo internada en el Molas hasta que le dieron el alta, y de ahí se fue con su mamá. “A la tarde la encontraron inconsciente en la cama, la trasladaron al Molas y ya le diagnosticaron muerte cerebral. Falleció al otro día a las 8 de la mañana”.
Agüera aseguró que: “El fiscal Casais me acusa sin pruebas”. Luego agregó, que “en el juicio voy a demostrar mi inocencia, porque está clarito como el agua que no la maté. Siempre me mantuve a derecho, nunca tuve una denuncia previa y pasé todas las pericias”. También comentó lo que recuerda de aquel día: él había llegado de trabajar, “comimos un asado y nos acostamos a dormir la siesta: estaba muy cansado porque había descargado 15 pallets de cerámicos”.
Luego, dijo que: “Salí de la cocina con el celular, y ella salió detrás de mí y cayó desmayada. Enseguida llamé a un vecino, le pedí que llamara a una ambulancia y a la policía, a quienes esperé en la puerta hasta que llegaron y los acompañé cuando ingresaron”.