En el marco de un día gris y lluvioso, familiares y amigos de Agustina Imvinkelried despidieron a la joven asesinada el último fin de semana en la localidad de Esperanza.
Sus restos fueron velados en una casa de sepelios ubicada en San Martín al 2500, en pleno cen tro de la ciudad y fueron inhumados alrededor de las 11 en el cementerio local. En la previa habrá un oficio religioso en la Basílica Natividad.
Esperanza no sale de la conmoción y este lunes toda la ciudad le dio su último adiós a la adolescente, que se aprestaba a cursar el último año de secundaria y tenía toda una vida por delante.
El caso generó mucho dolor y bronca en la comunidad, que incluso se movilizó como nunca en esa localidad para pedir justicia por el crimen. También exigieron que se tomen medidas necesarias para que esto no vuelva a ocurrir. De hecho, las marchas se replicaron en Santa Fe, en Rosario y otras ciudades del país.
Agustina Imvinkelried tenía 17 años y desapareció el domingo 13 de enero a las seis de la mañana. Fue vista por última vez a la salida de un boliche. La policía montó un operativo para dar con la joven y finalmente la encontraron sin vida en un descampado ubicado sobre avenida América, a unos 400 metros del local donde había ido a bailar con sus amigas.
Según se constató en base al relato de testigos, Pablo Trionfini, de 39 años, fue la última personas que la vio con vida y de hecho estuvo hablando con ella antes de su desaparición.
Con estos datos, la policía se dirigió al domicilio del hombre que, al verse rodeado, se quitó la vida. Ahora intentan establecer su vinculación con el episodio.