El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Rubén Michlig, aseguró que la provincia hará hincapié en la concientización tras anunciar la limitación de reuniones afectivas. Sobre esta última medida advirtió: "Si no somos respetuosos en esta instancia, lo que sigue es disminuir la actividad económica".
La restricción de los encuentros con familiares o amigos se consensuó con intendentes como parte del "esfuerzo para sostener" el funcionamiento de servicios, negocios y empresas habilitados tras la cuarentena. El funcionario planteó que dar marcha atrás en este ámbito generará "un daño aún más grave" en medio de la crisis que se desató a partir de la pandemia.
En paralelo con la prohibición parcial de las reuniones en domicilios particulares, las autoridades provinciales resolvieron "profundizar junto con municipios y comunas los controles en la actividad comercial" permitida. Así como notaron "cierto relajamiento en la sociedad", también admiten que hubo muchos locales donde no se respetó el distanciamiento para prevenir el contagio de COVID-19.
"Esperamos que esto tenga efecto en los próximos días para volver cuanto antes a la situación anterior", expresó Michlig en un reportaje con LT8 luego de la videoconferencia en la que participó junto al gobernador Omar Perotti e intendentes. En cuanto al cumplimiento de las medidas sanitarias por parte de la población, comentó: "Es difícil y estamos agotados, pero no nos queda otra que insistir sobre eso".