Después de habilitar varias actividades hasta ahora prohibidas por la emergencia sanitaria, el Gobierno de Santa Fe estudia habilitar el pago por energía consumida para empresas. La medida está entre las alternativas para paliar la crisis económica derivada de la pandemia y afirman que "aliviaría mucho el costo" de funcionamiento.
Al final de la videoconferencia en la que charló con su par nacional Matías Kulfas, el ministro de Producción Ciencia y Tecnología, Daniel Costamagna, recordó que muchas firmas "están trabajando con menor capacidad" y así deben afrontar un gasto importante "por algo que no usan".
La idea de dejar de lado el esquema de facturación actual basado en la potencia contratada se abordó durante la reunión de la que también participó el gobernador Omar Perotti y es algo que pretenden aplicar en otros puntos del país. Para ello es necesario llegar a un acuerdo entre las distribuidoras provinciales y la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa).
Por otra parte, Costamagna ratificó que el golpe por la propagación del COVID-19 abarca a unas 3.500 empresas, lo que representa a su vez alrededor de 65 mil puestos de trabajo en Santa Fe. "Esto refiere fundamentalmente a industrias manufactureras e implica alrededor del 60%", planteó el funcionario.